Trastorno de ansiedad por separación
¿Qué es el trastorno de ansiedad por separación?
Parte del desarrollo normal del bebé es aprender que las separaciones de los padres no son permanentes. Los bebés jóvenes no entienden el tiempo, así que piensan que un padre que sale de la habitación se fue para siempre. Tampoco han desarrollado aún el concepto de permanencia del objeto; ese objeto oculto sigue allí, es solo que no se puede ver. Sin estos conceptos, los bebés pueden tornarse ansiosos y temerosos cuando un padre ya no está a la vista. El trastorno de ansiedad por separación tiene su pico entre los 10 y 18 meses. Termina típicamente para cuando el niño tiene 3 años de edad.
¿Cuáles son las señales del trastorno de ansiedad por separación?
Los bebés que experimentan trastorno de ansiedad por separación temen que un padre deje la habitación y no regrese. El miedo puede empeorar en presencia de un extraño. Las respuestas típicas de los bebés que experimentan esta fase normal de desarrollo pueden incluir las siguientes:
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Llorar cuando deja la habitación
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Apegarse o llorar, especialmente en situaciones nuevas
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Despertar y llorar a la noche después de dormir previamente toda la noche
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No querer ir a dormir sin un padre cerca
¿Cómo puede ayudar a su hijo con trastorno de ansiedad por separación?
Los niños que se sienten seguros son más capaces de manejar las separaciones. Mimar y consolar a su hijo cuando están juntos puede ayudarle a sentirse más seguro. Las siguientes son otras formas de ayudar a su hijo con las separaciones:
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Consuele y tranquilice a su hijo cuando tiene miedo.
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En casa, ayude a su bebé a aprender independencia y para ello permítale que gatee solo a otras habitaciones (seguras) por un período de tiempo.
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Dígale a su bebé que se va a ir a otra habitación y que volverá; luego regrese.
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Planifique sus separaciones cuando su bebé está descansado y alimentado, en lugar de antes de una siesta o comida.
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Presente nuevas personas y lugares gradualmente, permita a su bebé que conozca a su nuevo proveedor del cuidado de la salud.
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No prolongue las despedidas y haga que su niñera distraiga a su bebé o niño con un juguete mientras se va.
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Presente un objeto de transición tal como una manta o juguete suave para ayudar a facilitar las separaciones.
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Cuando se despierte de noche, consuele y tranquilice a su hijo con palmaditas y palabras de aliento pero evite que su hijo salga de la cama.
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